La selección soviética volvió a los mundiales luego de dos
ausencias (1974 y 1978) para disputar el grupo 6 en España 82. El grupo lo
integraban además del cabeza de serie Brasil, la selección de Escocia y la de
Nueva Zelanda, que debutaba en Mundiales. Una de las mejores selecciones
brasileñas en la historia tuvo muchas dificultades para superar a los rusos,
que se adelantaron en el marcador con gol de Bal en Sevilla, aunque Sócrates yEder remontaron el partido sobre el final. La goleada ante los neozelandeses en
Málaga y el empate en la última jornada ante los escoceses en el mismo
escenario le permitieron clasificar al grupo A de la segunda fase. Los
soviéticos mantuvieron el invicto en esta instancia disputada en el Camp Nou
ante Bélgica (victoria 1-0) y ante Polonia (empate 0-0), pero quedaron fuera de
la competencia por diferencia de goles. Los rusos no contaron con ninguna
figura descollante en el Mundial, incluso los 7 goles que convirtieron fueron
marcados por jugadores diferentes, sin embargo, su juego de equipo férreo fue
casi insuperable para los rivales: sólo Brasil les ganó y con un gol en la
hora. El DT fuer el ucraniano Valeri Lobanovsky, multicampeón con varios
equipos en la URSS y en Ucrania luego de 1991.
Los soviéticos lograron mantener un nivel de élite en la
Eliminatoria para México 86, donde formaron parte del grupo C con Francia,
Canadá y el retorno de la mítica selección húngara. Como siempre, los
soviéticos superaron su grupo sin dificultades, superando a Hungría por 6-0 y a
Canadá por 2-0 en la ciudad de Irapuato, y empatando con Francia en un gol en
León, logrando por diferencia de goles la primera colocación del grupo. En
Octavos de final, en un épico partido, Bélgica se tomó venganza de los rusos alganarles 4-3 en el alargue, marcando para la URSS Belanov en tres ocasiones
(sería el goleador soviético con 4 goles en el torneo). Otra vez los de
Lobanovsky cumplían una buena labor en un torneo mundial.
La
última participación de la URSS como tal en mundiales sería la de 1990,
de ahí en más sería Rusia propiamente dicha la que participaría en la
cita mundialista. Los soviéticos no pudieron repetir las aceptables
actuaciones anteriores, y quedaron por primera vez en la historia
eliminados en primera ronda. El grupo estaba conformado por Rumania,
Argentina y Camerún. La URSS hipotecó su chance en los dos primeros
partidos con las derrotas 2-0 ante los rumanos y los argentinos. De nada sirvió la goleada 4-0 ante la ya clasificada revelación del grupo, Camerún.
