Cuando
todavía la Copa Libertadores estaba en pañales, los clásicos y partidos
históricos se empezaban a suceder. En la edición de 1963 clasificaron a
semifinales los dos equipos brasileños por un lado (Botafogo como mejor
equipo del fútbol brasileño, y Santos como último campeón del torneo), y
Boca Juniors y Peñarol por otro. El equipo de Pelé buscaba retener el
título y superó en la vuelta por 4-0 a los cariocas, mientras que Boca venció a Peñarol para acceder a la final.
En el primer partido disputado en Maracaná ante 100.000 personas, los paulistas se impusieron por 3-2, con dos goles de Coutinho y uno de Lima para los locales. Boca mejoró su performance en la segunda mitad, donde descontó en dos ocasiones a través de Sanfilippo, emparejando la serie. Para la vuelta en la Bombonera, una multitud acompañó al popular cuadro porteño, que llegaba a su primera final continental ese año. Los bosteros contaban con jugadores de enorme calidad y experiencia, como Rattin, Grillo, Menéndez o el ya mencionado nene.
El primer tiempo, muy friccionado, se fue 0-0 con más discusiones y patadas que fútbol. Pero en la segunda parte, Boca abrió el score por medio de su goleador Sanfilippo, aunque Coutinho igualó rápidamente las acciones. Los argentinos buscaron vulnerar la valla de Gilmar, pero la férrea defensa blanca, con valores como Calvet, Dalmo y Mauro logró sostener el partido hasta que a los 82 el gran Pelé liquidó el campeonato en favor de los brasileños.
Boca iba a sufrir su primera gran derrota en la competencia internacional, y Santos pero en especial Pelé, iba a tener su gran consagración, reforzada luego por las victorias ante Milan en la Copa Intercontinental. Sin embargo, la revancha, que siempre llega, iba a suceder 40 años después. Abajo tenés imágenes de la segunda final, gracias a youtube y al canal correspondiente.