Los
años 2000 nos ilusionaron con un fútbol más justo, más parejo, más
atractivo. Con el poder no tan concentrado, con el poder económico en
segundo plano. Danubio y Defensor dieron la cara y nos pareció que la
eterna dicotomía de los grandes en el fútbol uruguayo podía llegar a su
fin. Nada más lejos de la realidad, qué ilusos! Peñarol y Nacional ya
están primeros en el campeonato y será imposible, al menos en este
torneo que alguien les discuta el campeonato. Esperemos que demuestren
en la Copa Libertadores lo que tan fácil les resulta en el torneo
uruguayo.