El fútbol nos volvió a regalar un partidazo y una definición apasionante, y el Barcelona de Messi volvió a fallar en una instancia crucial, a pesar de tener una diferencia apreciable, y de jugar ante un equipo presumiblemente inferior. Pero nada de eso, Roma fue mucho más que Barcelona en el Olímpico y selló una jornada histórica, ya que es la primera vez que accede a las semifinales del máximo torneo continental. El equipo de Di Francesco comenzó el partido con el pie derecho, abriendo la cuenta a los 6 minutos con gol de Dzeko tras ganarle la posición en el área a Umtiti y Piqué. Al Barcelona le costó generar chances de gol y además fue tibio en la zona defensiva, y el penal convertido por De Rossi a los 58 minutos precipitó la catástrofe. Ter Stegen salvó a los catalanes en un par de ocasiones, pero a los 81 minutos Manolas anticipó de cabeza a la salida de un córner para marcar el 3-0. Casi no hubo tiempo para más, los ataques de los culés se desvanecían al llegar a las inmediaciones del área, Messi no encontró la sangre y Suárez estuvo entreverado todo el partido. El equipo de Valverde se queda con las manos vacías, le queda por delante el tramo final de La Liga y la final de la Copa del Rey, que toma ahora una importancia vital.
11/04/18