La tremenda definición del torneo Apertura del fútbol uruguayo decantó en un merecido campeonato para Nacional, que no falló en la definición a pesar de haber tenido varios contratiempos de los que supo sobreponerse. Los tricolores tuvieron un primer tiempo tibio, ante un Danubio concentrado y ejecutando correctamente el plan de Peirano, que consistió en no dejar jugar cómodamente a Nacional en la mitad de la cancha y esperar su momento para lastimar. El gol de Terans a los 36 minutos, convertido casi en el mismo momento que el empate de Rojo en el Campeón del Siglo, hizo temblar la estantería del campeonato. El delantero danubiano aprovechó un quede defensivo del capitán Polenta para ganarle en el mano a mano y definir ante la salida de Conde. Pero en el segundo tiempo el partido cayó por su propio peso, el equipo de Medina le imprimió intensidad y la franja no soportó físicamente. Se destacaron las actuaciones de Espino, Bergessio y Sebastián Fernández. El empate fue convertido por el argentino con definición corta en el área chica y el segundo llegó a los 82 minutos también desde cerca del arco pero por medio de Sebita Fernández. Las asistencias fueron ambas de Espino, que cuando está fino con el balón es el lateral más desequilibrante del fútbol uruguayo. El equipo blanquinegro no tuvo fuerza en los minutos finales para inquietar al campeón, que mostró carácter en el momento indicado, y que se sobrepone en esta primera parte del año a un comienzo turbulento en el verano. Alexánder Medina es el principal ganador de esta primera mitad del año, logarando en pocos meses formar un equipo sólido, solidario y con buenas intenciones futbolísticas que por momentos se transforman en buen fútbol. Nacional es justo campeón del torneo, más allá de que Peñarol también lo hubiera sido. Esta historia continúa, pero los tricolores tienen su participación en la definición del Campeonato Uruguayo asegurada.