El equipo de Leo Ramos perdió en la noche del miércoles ante Atlético Tucumán por 1-0, por la quinta jornada de la fase de grupo de la Copa Libertadores de América. Los argentinos fueron un poco más que lo mirasoles, y se llevaron un triunfazo que los deja a un punto de la clasificación. El primer tiempo fue parejo, con ambos equipos poniendo pierna fuerte y siendo imprecisos, con muchos cortes y detenciones por lesiones y golpes en varias jugadas. Los volantes de creación tocaron poco la pelota, por el lado de Peñarol, Canobbio y Corujo casi no entraron en juego y en el decano Acosta y Núñez no recibieron la pelota bien jugada. Mucho trabajo para el árbitro Ricci que tuvo que amonestar un par de jugadores, e incluso expulsar al ruso Zielinski por sus airadas protestas. Corujo salió por lesión a los 42 minutos, ingresando por él Franco Martínez, y el golero argentino Batalla tuvo que retirarse en el entretiempo por una lesión muscular.
La segunda parte siguió en la misma tónica, aunque el juego se cortó menos, y sobre los 15 minutos Leandro Díaz iba a aparecer por izquierda con jugada individual, para definir bajo al primer palo, aprovechando el cachón que inexplicablemente Peañarol dejó dentro del área. Desde ese momento el partido cambió y el local encontró más espacio en el campo rival, especialmente en un contragolpe que tuvo espacio y superioridad numérica pero que no pudo concretar. Los uruguayos, a pesar de irse arriba, tuvieron grandes dificultades para generar chances de gol, y lograron solo algunos acercamientos. Demasiado poco para un equipo que pretende estar en octavos de final. Sin respuestas desde el banco y con alguna de sus figuras sin rendir, especialmente Cristian y Maxi Rodríguez que tuvieron un mal partido. El 1-0 final, determina que Peñarol deba ganar ante The Strongest como local en el cierre del grupo y esperar que Atlético Tucumán pierda en su visita a Libertad.
03/05/18